Ya iniciamos febrero, en teoría el mes más romántico del año, ¿cuáles son tus planes?, ¿vas a celebrar el 14 con alguien especial?, ¿ya te viste camino al altar o viviendo junto a esa persona especial bajo el mismo techo? ¿o probablemente ya estás en una relación formal y eres de los que cree que eso es sólo un pretexto más para el consumismo?
El amor es muy bonito y todo, pero quieras o no por más compatibilidad de personalidad, gustos, etc. Es necesario hablar de todos los temas importantes y trascendentales, entre ellos por supuesto el tema financiero en pareja. Si en tu relación el tema del dinero es un tabú, es complicado de abordar o no sabes como hacerle porque te da terror abrirte desde esa perspectiva con tu pareja, te propongo que éste 14 de febrero armes un “Date financiero” con tu pareja, estos son los tips para que el tema económico no arruine el mood romántico, así que manos a la obra:
Antes de empezar, crea un ambiente agradable, de preferencia que sea después de desayunar para que no tengan hambre y tampoco es recomendable que no sea hasta la noche, porque hacer números o cuentas, cuando estás cansado puede ser irritante si no estás despejado mentalmente.
1. Debemos empezar teniendo una charla honesta sobre los ingresos y gastos de cada uno, y sobre todo si existen deudas o compromisos familiares, cuando terminan esos compromisos, o son a largo plazo.
2. El siguiente punto son los planes a futuro, cuáles son sus objetivos, quieren construir un patrimonio juntos, quieren ahorrar para tener un retiro a temprana edad, etc., éste punto los hará reflexionar en qué tan compatibles son sus metas como pareja.
3. Cuando se casen (o vivan juntos) o si ya lo están, la administración es clave. Respondan con claridad y compromiso: ¿Cómo van a compartir los gastos?, ¿Quién va a pagar qué cosa?, ¿van a compartir sus cuentas? o quizás tener una cuenta conjunta para los gastos en pareja, ¿Qué pasará si alguno se queda sin trabajo? Es importante que ambos estén en la misma sintonía y de acuerdo en el tema económico antes de que cause problemas en su relación.
Una vez que estos puntos estén claros, será mucho más sencillo establecer un presupuesto en conjunto. Definan sus tareas financieras tanto individuales como de pareja que les permitirán cumplir los objetivos previamente acordados.
Este “Date financiero” debe realizarse al principio con una frecuencia mensual, pero si las cosas van marchando bien y conforme a lo acordado, pueden espaciarse a una vez por trimestre o cada seis meses. El chiste está en que vayan midiendo sus avances y puedan identificar oportunamente si hay áreas de oportunidad o más bien oportunidades para crear más.
Nunca es tarde para aclarar un punto tan importante en la pareja, como lo son las finanzas, no dejes que se cumpla ese dicho de "cuando el dinero sale por la puerta, el amor sale por la ventana". Ahora sí, a disfrutar del “Date”.
¡Feliz mes del amor!
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